La tarde estaba apacible, Alba Marina veía con atención la ventana con las escarolas de hielo, que la nieve de la noche anterior había dejado, mientras fumaba un cigarrillo con su perra valquiria, a sus pies como siempre y sus tres gatos junto a la estufilla de gas que calentaba la pequeña casa. El invierno en el Norte esos días era mortal, pero ella amaba el frio y esas fechas la ponían nostálgica como a tantos otros seres…
Tomo el libro que tenía en la mesita y pensaba retomar su lectura, cuando escucho venir desde el cuarto unos pasitos suaves, y una voz que murmuraba -¿mami aun no dormirás?- se sonrió solo al oírla y volteo a buscarla, era Maxine, su muñeca de chocolate, como gustaba de llamarla, sus preciosos rizos estaban despeinados y lucía una pijamita lila con ositos muy simpática que le había regalado hacía tiempo ya.
No tengo sueño aun- le respondió mientras la sentaba en sus piernas- que te ha despertado mi pequeña -le dijo mientras, acariciaba sus mejillas…ella hizo un mohín de disgusto, ¡te extraño en la cama mami!
Maxine estaba en su pequeño espacio, era lo que se llama en mi mundo, una Little sum, pequeña eterna que pasaba recién de los 20 y que me pertenecía por consenso de ambas, a mí y a mi pareja ambos Dominantes.
¿A qué hora llega Papi?, dijo con un dulce puchero que lograba enternecer mi corazón de la Domina y despertaba a la madre perversa…
-No lo sé preciosa, está en una junta le dije mientras le preparaba leche tibia con chocolate y un platito de galletas.
Pero, pero ¡yo quiero a mi papi!,- Alba arrugo el ceño, y la miro de una forma que ella se quedó con la palabra en la boca y bajo la mirada…
Tu papi ha de llegar cuando sea preciso pequeña puta, le dijo con una suavidad de miedo- mientras sonreía…la niña la vio con ojos enormes, he intento hacer nuevamente un puchero a lo que Alba contesto con un azote leve, que ruborizo a maxine y la sorprendió también, la tomo por el cabello y le comió la boquita suavemente, disfrutando del sabor de su boca húmeda, mientras le subía suavemente el pijamita y le decía al oído, has sido una buena nena hoy, y mami quiere darte un premio pequeña, ¿quieres Maxi?.
Esa era la palabra que llevaba a Maxi a su pequeño espacio y le permitía ser la niña traviesa de Alba…la pequeña gimió levemente asintiendo con la cabeza- le mordió la oreja, no te escucho maxi! Si mami susurro por favor, por favor. Alba la soltó riendo pero que putita eres mira como tienes esa pantaletita…la nena se agacho y vio su braga empapada, -ve por los juguetes, niña caliente, los quiero aquí ya- ¿aquí en el salón? Pero mami, dijo entrelazando sus deditos, papi llegara y nos vera dijo titubeando…Alba se hizo como que no la veía y se sentó nuevamente en su silla y tomo su libro, sin verla le dijo, bueno está bien si tu no quieres…anda a dormir, le dijo firmemente o tienes 3 minutos para estar aquí con lo que te pedí.
La nena se debatía entre el deseo y su vergüenza, pero finalmente trajo su maletita rosa con dibujos de una gatita conocida…sin decir nada solo tatareando una cancioncilla y observando de reojo a su mami, trajo la mesilla y empezó a poner su juguetes sobre ella, un precioso dildo rosa de cristal, pinzas, algunos floggers, el strap on de mami que tanto le encantaba y que ella había comprado como regalo de cumpleaños, la pequeña gata tenía un arsenal que podía envidiar más de un Dominante.
Alba adoraba ese ritual, ese momento en que esa chica preciosa cedía su control y su placer a quien había elegido y que sabía que la cuidaría por encima de ella misma.
Como has sido buena niña te dejare escoger el primer juego cariño, le dijo rodeándola con suavidad.
La pequeña tomo el dildo rosa y se lo ofreció a su mami, ella le dijo entíbialo con tu saliva mi cielo y vio como lo metió presta a su boca sin dejar de mirarla, le dijo quítate la pijamita
Había siempre un dialogo callado ente ellas, uno que las llevaba a entenderse casi solo con gestos. Alba le pidió que se acostase sobre el sofá y con cuidado la tendió boca abajo comenzó a besar su espalda bronceada siguiendo su columna con un dedo, intercalaba su mano fría con el aliento tibio y la veía estremecerse, soltó el primer azote…
Y le dijo, cuenta pequeña.
Ella suspiro y le dio más fuerte…dije que cuentes
Y escucho claro el 2 de maxi
3,4 y así hasta 20 que alternaba sobando el precioso culo de maxi que había adquirido un tono rojizo ya, durante los últimos 5 azotes Alba, había empezado a acariciar lentamente el botoncito de su nena, y ella gemía con más fuerza por lo que le puso su mordaza- shhhht haces mucho ruido nena, calladita te ves más linda-
Trajo el dildo y lo metió despacio, mientras ella la miraba pidiendo más y hacia gemidos guturales y desesperados, no niña es como yo quiera y mami no tiene prisa, le dijo haciendo círculos en ese coño que tanto disfrutaba, -que sucia eres maxi, que preciosa putita tengo- dijo mientras la veía cambiar y acompasar el movimiento del dildo -así, no te detengas- le dijo mientras la veía llegar a un punto del que no hay retorno, o al menos eso creía maxi, dio un fuerte azote a su sexo y saco el dilo sin aviso.
Ella comenzó a llorar -no maxi! ¿Quién te dio permiso?- le quito la mordaza para oír sus sollozos
-De cuando acá las nenas se corren primero- le dijo mientras tiraba de sus pezones y los mordía -primero tomas la leche de Mami, putita mal educada; ¿qué se hace niña?- le dijo mientras se acomodaba en el sillón con las piernas abiertas, maxi sonrió y le pregunto -¿me das de cenar Mami?-
Alba abrió las piernas y le dejo sacar sus bragas -despacio quiero sentirte lento o no te corres hoy- le dijo con voz ronca…y entrecerró los ojos al sentir su lengua tibia, maxi sabía hacerlo muy bien, Alba acariciaba esos rizos que sobresalían entre sus piernas y los tiraba con suavidad mientras ella le hacia una chupada fenomenal. Alba estaba llegando al orgasmo cuando escucho abrirse la puerta, sin darle importancia le dijo a maxi que siguiera, ella levanto la cabeza y le dijo ¡Mami es Papá!.. La tomo de los rizos y la clavo en su coño nuevamente dejándola tomar un poco de aire, sigue dije.
Él entro al salón, se quitó el abrigo negro, lo colgó del perchero y dio la vuelta frotándose las manos por el frio, desde el Angulo que estaba solo veía a Alba recostada, así que tomo la decisión de acercarse a besarla por atrás, ella le sonrió y le dijo que tal el trabajo mientras lo besaba apasionadamente, el vio a la chiquilla “cenando” y sonrió. -Pero que cochinas son- ¿no podían esperarme?, dijo mientras se puso detrás de maxi y le dio una mordida en el culo-
Alba dijo, -nena baja el pantalón a Papa que él también quiere jugar-, si grito la traviesa Little y soltó el cinturón de su Papi dejando ver el “rabo” duro después de la escena con la que se encontró, -quiero ver como comes a mami, nena enséñame que bien lo haces- ella asintió mientras El acariciaba sus tetas y la masturbaba con los dedos, papi eso me encanta dijo susurrando, -no puedes correrte hasta que lo haga Mami pekeputi- así la llamaba siempre, Alba estaba lista cuando vio a su Hombre embestir el culo de maxi con fuerza y bombearla rápidamente; el grito de la pequeña y de ambos fue delicioso cuando les dijo -córranse mis niñas-.
El tiempo se detuvo mientras los tres explotaban al unísono.
Después de sesionar por largo rato, se metieron los tres a la ducha y Alba junto a Jacobo acariciaban a su niña, felices y plenos. En su andar como Dominantes y parejas nunca habían tenido una Little, pensaban que sería complicado, pero esa linda mujercita les había robado el corazón a los dos, con su ternura y su afán de complacerles y hacer de ellos padres-Doms completos y orgullosos.
La llevaron a la cama y la arreglaron para dormir, mientras Jacobo se la acomodaba entre los brazos, Alba le besaba las manitas.
-Porque la gente piensa que es malo que nosotros tengamos esta relación Mami, si yo me siento feliz y les amo mucho-, dijo llena de ternura y ya somnolienta
Porque es más fácil juzgar a los demás que entenderlos, los miedos, mi nena nos embisten y los demás temen lo desconocido, Jacobo se acercó a Alba y la beso, recordando el verso de Machado “Es propio de aquellos con mentes estrechas, embestir contra todo aquello que no les cabe en la cabeza”… Alba apago la luz, y tomo la mano de Jacobo…te he dicho hoy cuanto te admiro Dragón?...el solo sonrió y le dijo anda ,es hora de dormir…
Título<: La cena especial de Mamá
Autora: Panthere Bleu,